Una mujer identificada como Lateesha Taylor Riddle, quien en el 2022 se había entregado a las autoridades del condado de Bibb tras ser acusada en relación con la muerte de su esposo, ahora está libre de cargos.
La Fiscalía del Distrito de Macon retiró las acusaciones cargos contra la mujer que disparó y mató a su esposo Eddie Riddle durante una acalorada discusión.
El pasado viernes, la fiscalía estatal declaró que las acciones de Riddle estaban justificadas y que no tienen pruebas para refutar su alegación de defensa propia, según reportó WGXA.
De acuerdo con una moción presentada por la fiscalía el 2 de octubre de 2024, los Riddle comenzaron a discutir cuando ella regresó a su casa en Macon, en Zebulon Road, después de ir al supermercado.
El señor Riddle estaba enojado porque su esposa se había ido de la casa sin avisarle, y le dijo que necesitaba “aprender a ser una mejor esposa” y que su madre, quien se encontraba en la residencia en ese momento, debía enseñarle.
Cuando ella regresó de la tienda, tiró al suelo la compra y la comida que ella estaba preparando y la agredió lo mismo que a su madre.
La hija de dos años de los Riddle entró llorando en la habitación, pero el señor Riddle la arrebató violentamente de los brazos de su madre y la tiró al suelo.
La fiscalía afirma que Riddle entró en su habitación, tomó un arma de fuego y amenazó con disparar a todos y a sí mismo.
El hijo de la señora Riddle, que no estaba en la habitación, testificó que escuchó a su madre decir: “No vas a golpear a mi mamá” y a su abuela decir: “No vas a ponerle las manos encima”.
Cuando el hombre se abalanzó para golpear a la madre de su esposa, la mujer le disparó y lo mató.
La fiscalía afirmó que la evidencia documentada demostraba que esta no era la primera vez que Riddle agredía a su esposa en sus cuatro años de matrimonio.
También la mujer proporcionó, fotos de sus lesiones cuando su esposo la golpeó y estranguló. Además, hubo ocasiones en las que el agresor apuntó con un arma a la cabeza de su esposa y amenazó con dispararle.
La fiscalía afirma que esto demuestra un patrón de maltrato doméstico físico, psicológico y emocional.
