Defensa del presunto asesino de Susana Morales, dice que no hay evidencias de que él sea el responsable de su muerte
Durante la jornada de este jueves, uno de los oficiales de investigación de la policía de Gwinnett rompió en llanto durante el interrogatorio
El juicio contra Miles Bryan exoficial de policía de la ciudad de Doraville, acusado del secuestro, intento de violación, secuestro y asesinato de la joven de 16 años Susana Morales, comenzó este lunes en las cortes del condado de Gwinnett donde ocurrieron los hechos en el 2022.
El juicio contra Bryant comenzó el lunes con la selección del jurado, que continuó hasta la tarde del martes, tiempo durante el cual, los abogados hicieron a los posibles jurados una serie de preguntas para tratar de seleccionar un grupo imparcial.
AFT reportó, que algunas de las preguntas del jurado incluyeron cómo se sentían acerca de la legalización de la marihuana y si sus propios hijos alguna vez se habían escapado de casa.
Esto, porque uno de los aspectos que ha salido a relucir durante la investigación y el proceso del juicio es el hecho de que, la noche de su desaparición, Morales habría ido a la casa de su amiga a fumar marihuana.
Declaraciones de apertura
Este miércoles comenzaron las declaraciones de apertura y el testimonio de los testigos como parte del juicio, y una de las primeras en declarar fue Maria Brand la madre de la víctima.
En el transcurso de estas declaraciones de apertura, los fiscales dijeron que Morales fue al apartamento de un amigo el 26 de julio de 2022 para fumar marihuana y nunca regresó a casa.
Esa casa a la que fue la joven estaba ubicada en el mismo complejo de apartamentos donde vivía Bryant, el ahora acusado.
Las autoridades dijeron siete meses después que los restos de Morales fueron encontrados siete meses después en un bosque junto a la autopista 316, de los cuales solo quedaba un esqueleto por lo que tuvo que ser identificada mediante registros dentales.
Los fiscales estatales dijeron a los jurados que la evidencia les mostrará que el teléfono de Bryant hizo ping a la ubicación donde se encontró el cuerpo de Morales en las horas posteriores a su desaparición.
“Usó su placa y usó su posición para satisfacer sus propios deseos sexuales. Es un policía que se convirtió en un asesino”, dijo el fiscal especial Brandon Delfunt, durante el juicio al cual se le ha permito la entrada a los medios de comunicación.
El miércoles también la defensa de Bryant admitió que el entonces oficial mintió a los agentes de policía y reportó falsamente que su arma de fuego proporcionada por el departamento, le había sido robada, la misma que fue encontrada cerca de los restos de Morales.
“No hay evidencias que demuestre que Bryant secuestró, violó o mató a Morales”, dijo la abogada del acusado Tracy Blake.
“Está bien odiar a Miles Bryant. Pueden odiarlo todo lo que quieran. Sin embargo, les voy a pedir que dicten un veredicto que lo haga responsable de sus acciones. Pero no es asesinato, no es asesinato grave, no es secuestro y no es un intento criminal de cometer una violación”, dijo Blake al jurado.
Durante la jornada de este jueves, uno de los oficiales de investigación de la policía de Gwinnett rompió en llanto durante el interrogatorio, recordando los episodios previos a la desaparición de la joven y el posterior hallazgo de sus restos.
Se espera que este juicio demore dos semanas y que al final el sindicado sea encontrado culpable por la serie de evidencias que dice tener la fiscalía en su contra.
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