Tragedia en “pollera” de Gainesville fue “innecesaria, sin sentido y previsible”
El mortal escape de nitrógeno tuvo lugar en una de las líneas de trabajo de la compañía Foundation Food Group, y como consecuencia los seis operarios quedaron prácticamente congelados al instante.
“Muy seguido, muy seguido teníamos que salir corriendo para fuera porque, el fuerte olor a Amoniaco no lo soportábamos, no se muevan de sus lugares, no dejen la línea sola…”, es lo que recuerda María Inés una trabajadora de las plantas procesadoras de pollo de Gainesville al norte de Atlanta, sobre incidentes de fuga de químicos en su lugar de trabajo y las reacciones de sus empleadores.
“Es que no aguantamos, estamos aquí y nos vamos a desmayar… y mire pasó esta desgracia de que fallecieron estas personas…”, recuerda un poco triste la mujer quien ha trabajado por 30 años en el mismo oficio.
María se refiere a José De Jesús Elías Cabrera, de 45 años, de Gainesville; Corey Alan Murphy, 35 años, de Clermont; Nelly Pérez Rafael, 28, de Gainesville; Saulo Suárez Bernal, 41 años, de Dawsonville; Víctor Vélez, 38, de Gainesville; y Edgar Vera García, de 28 años, de Gainesville.
Estas seis personas perdieron la vida el 28 de enero de 2021 en las instalaciones de Foundation Food Group, tras una fuga de nitrógeno que levantó las alarmas a nivel nacional sobre el tratamiento seguro de estos productos químicos en las instalaciones de estos negocios, donde la mayoría de quienes laboran son de origen latino.
Una tragedia evitable
El día de los hechos, seis personas murieron y decenas más fueron evacuadas tras una fuga de nitrógeno líquido en la planta procesadora de alimentos, y, de acuerdo con los investigadores del condado de Hall cinco de las víctimas murieron dentro de la planta y otra persona murió tras ser trasladada de urgencia al hospital.
El mortal escape de nitrógeno tuvo lugar en una de las líneas de trabajo de la compañía Foundation Food Group, y como consecuencia los seis operarios quedaron prácticamente congelados al instante.
Tras la autopsia practicada a sus cuerpos, las autoridades determinaron que las seis personas murieron por asfixia al estar expuestos al mencionado químico.
Ahora, casi tres años después, el presidente de la Junta de Investigación de Riesgos y Seguridad Química de Estados Unidos dijo que la “tragedia innecesaria y sin sentido era completamente prevenible”.
El informe de la junta advirtió “fallas de equipos y procesos” en la instalación.
Los abogados que trabajaron en la demanda posterior descubrieron que un “tubo burbujeador”, que detecta el nivel de nitrógeno líquido para evitar desbordes, estaba “dañado y desplazado de su orientación original” durante una inspección del 6 de marzo, según documentos judiciales.
“El informe también determinó que la gravedad del incidente empeoró por la preparación inadecuada para emergencias, lo que resultó en que al menos 14 empleados ingresaron a la cámara del congelador o al área circundante para investigar el incidente o intentar rescatar a los compañeros de trabajo, y la falta de instalación de aire por parte de la compañía FFG, dispositivos de monitoreo y alarma que podrían haber alertado a los trabajadores sobre la peligrosa nube de vapor y advertirles que no ingresaran a la cámara del congelador”, según un comunicado de prensa de la junta de seguridad.
La compañía Messer, una empresa de gas industrial, arrendó su congelador a FFG. La empresa fue demandada en los tribunales del condado de Gwinnett y esos casos se resolvieron posteriormente a favor de las víctimas.
El informe final hizo una docena de recomendaciones de seguridad dirigidas a diferentes agencias y a Gold Creek Foods, que compró la propiedad de Foundation Food Group.