Senado estatal aprueba dos medidas catalogadas como “anti-inmigrantes”
Los defensores de las medidas sostienen que son necesarias para garantizar la seguridad pública y hacer cumplir las leyes de inmigración.
El jueves, el Senado de Georgia aprobó dos medidas que pretenden abordar el tema de la inmigración en el estado. Estas iniciativas se presentan como parte de una respuesta política continua al trágico homicidio de Laken Riley, una estudiante de enfermería presuntamente asesinada por un venezolano en la Universidad de Georgia.
La aprobación de estas medidas ha generado un intenso debate político y social en el estado.
La primera medida aprobada, conocida como Proyecto de Ley de la Cámara de Representantes 301 (HB 301), fue aprobada con 34 votos a favor y 18 en contra. Este proyecto de ley sancionaría a ciudades y condados que, según sus partidarios, brinden refugio a inmigrantes indocumentados, reduciendo significativamente la ayuda estatal y destituyendo a funcionarios electos.
Además, el Senado aprobó el Proyecto de Ley de la Cámara de Representantes 1105 (HB 1105), con una votación de 34-19. Esta medida busca obligar a las autoridades penitenciarias a verificar el estatus migratorio de los reclusos. Los republicanos, que conforman la mayoría en el Senado, votaron a favor de ambas medidas, mientras que los demócratas se unieron para rechazarlas.
El senador estatal republicano John Albers enfatizó que estas medidas se centran en la seguridad pública y en la identificación de delincuentes.
Sin embargo, los demócratas y otros opositores argumentan que las medidas son innecesarias y pueden llevar a la discriminación racial por parte de la policía hacia la comunidad hispana.
¿Qué va a pasar ahora?
Las medidas ahora regresan a la Cámara de Representantes para un nuevo debate. La aprobación de estas iniciativas se produce después de que una comisión del Senado aprobara dos proyectos de ley menos estrictos, lo que plantea dudas sobre el aspecto final de un paquete legislativo en materia de inmigración.
Los defensores de las medidas sostienen que son necesarias para garantizar la seguridad pública y hacer cumplir las leyes de inmigración. Sin embargo, los críticos argumentan que podrían conducir a la discriminación y a la separación de familias inmigrantes.
El debate sobre la inmigración en Georgia continúa siendo un tema controvertido, y se espera que estas medidas generen un intenso escrutinio y debate en las próximas semanas.
