La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) del Departamento de Transporte de EE. UU. lanzó este martes su campaña anual “Abróchate o serás Multado” de alta visibilidad para el control del uso del cinturón de seguridad.
Insta a conductores y pasajeros a abrocharse siempre el cinturón de seguridad y les recuerda las consecuencias potencialmente mortales de no usarlo.
“La cantidad de vidas que perdemos en las carreteras cada año es inaceptable”, declaró el secretario de Transporte, Sean P. Duffy.
“Los cinturones de seguridad, junto con una mayor vigilancia vial, son nuestra mejor defensa para reducir estas tragedias prevenibles. Nuestro mensaje es claro: abróchalo o paga una multa”
La campaña y las cifras
La campaña de este año, que se extenderá hasta el 1 de junio, cuenta con el apoyo de una inversión mediática nacional que incluye anuncios en inglés y español para televisión, radio y plataformas digitales.
Además, las agencias policiales estatales y locales de todo el país están trabajando juntas durante un período de mayor vigilancia para ayudar a mantener la seguridad de las comunidades y recordar a todos los riesgos asociados con viajar en un vehículo sin abrochar el cinturón de seguridad.
Según datos de la NHTSA, el 49 % de los ocupantes de vehículos de pasajeros que fallecieron en accidentes en 2023 no llevaban puesto el cinturón de seguridad.
Además, el 42 % de los fallecidos en accidentes de tráfico en 2023 durante el día, entre las 6:00 a. m. y las 5:59 p. m., no llevaban puesto el cinturón de seguridad, en comparación con el 56 % de los fallecidos por la noche, entre las 6:00 p. m. y las 5:59 a. m.
La campaña también busca aumentar el uso del cinturón de seguridad entre los ocupantes de vehículos de pasajeros de entre 18 y 34 años, especialmente entre los hombres de ese grupo de edad, ya que son los más propensos a verse involucrados en un accidente mortal sin cinturón de seguridad.
Entre los ocupantes de vehículos de pasajeros masculinos que murieron en accidentes en 2023, el 53 % no llevaba el cinturón de seguridad abrochado, en comparación con el 41 % de las mujeres.
